Santiago Guarderas: ‘Quiero ser un concejal de territorio, no de escritorio’

ARCHIVO. Guarderas, en una de las entrevistas concedidas a Diario La Hora.
ARCHIVO. Guarderas, en una de las entrevistas concedidas a Diario La Hora.

Santiago Guarderas ha pasado por varias campañas, pero en esta se topó con una pequeña muralla. Una muralla sobre la que en las calles se habla bastante: “La gente está cansada de escuchar a politiqueros que solo se presentan en época electoral. No está fácil, inicialmente, entablar un diálogo, porque le dicen: ‘ya vienen los políticos de toda la vida, los que nunca más regresan y lo que ofrecieron: puras mentiras’”.

Guarderas encabeza la lista de candidatos a concejales en el distrito sur por el movimiento Unión Ecuatoriana (lista 19) y ha descubierto barrios que no conocía. “Especialmente, los que están en las lomas, en lo más alto”, dice, aunque evita hacer una lista.

Ha podido escuchar, entonces, los problemas que más le preocupan a la gente. Los enumera: seguridad, basura, calles, movilidad, transporte público, obras no ejecutadas, informalidad, falta de empleo.

Queremos, imaginariamente, darle la vuelta al Panecillo, para que no solamente mire al norte o al centro, sino también al sur”.
“Hay barrios con unas necesidades que uno, a veces, no ha tomado el cuidado de saber. Usted ve una que, en teoría, se llama calle, pero son quebradas. Uno no entiende cómo transitan los carros, cómo pasan las personas.

Creo que es importante vivir, sentir, para saber la desesperación”. Ahora, a pocos días de la elección, habla con La Hora sobre sus propuestas para hacer de este Quito que él describe algo diferente.

¿Qué propuesta lleva, entonces, para cambiar esto, desde el Concejo?

Si nos vamos al punto estrictamente jurídico, el Concejo tiene que legislar y fiscalizar. Hay que hacer una depuración completa de las ordenanzas, para que respondan a las necesidades de la población y que provean de soluciones a esos problemas. Fiscalizar que no haya corrupción, que el dinero de los quiteños se maneje de una manera pulcra, sin sobreprecios. Y hay otra cosa: la participación ciudadana, que está prevista en el Código de Ordenamiento Territorial.

Pero la silla siempre quedó vacía…

Es que no se puede quedar en la silla vacía. Y ese es uno de mis mayores compromisos: ser un concejal de territorio y no un concejal de escritorio. Romper con eso de que la gente sienta que los candidatos aparecen solamente en épocas electorales. Yo quiero estar junto a la gente, en sus problemas, en sus soluciones. Yo soy parte de un proyecto, que está sustentado. Queremos hacer una transformación.

Pero, ¿cómo?

No haciendo obras faraónicas, sino atendiendo aunque sea los problemas chiquitos, para devolverle a Quito el liderazgo. Con un cambio de gestión, que tiene que ser tajante, radical. Tiene que darse prioridad a la inversión en el ser humano y no al gasto público. Uno de los ejes que nos preocupan mucho, creo que en el número uno, es la seguridad. Todos los días uno se entera de crímenes atroces.

Pero, dado que la seguridad no es una competencia municipal, ¿qué propone hacer?

Liderar. Hay que hacerles sentar a las autoridades, policiales y militares. Tener videocámaras en todo Quito, con una Policía que tiene que reaccionar inmediatamente. Promoveremos la coordinación, debe haber acuerdos, pero usted también tiene que exigir, como autoridad, no puede estar cruzado de brazos. Exigir que haya permanente control de la Policía. Hay que hacer que estén en plena vigencia las unidades de Policía Comunitaria. Hay algunas que están abandonadas y hasta se han convertido en guaridas de delincuentes, drogadictos y alcohólicos.

También debe haber iluminación en todas las calles de Quito. Hay calles sin luz y son espacios que usan los delincuentes para esconderse y atacar. Se tienen que ocupar los espacios públicos. En las plazas desoladas también se esconden los delincuentes y ahí se podría hacer arte, cultura, gastronomía. La ocupación del espacio público ahuyenta a los delincuentes.

¿Ha pensado en ordenanzas que podría llevar usted como propuestas?

Las ordenanzas están, pero por eso hablo de depuración. Si los aspectos que he mencionado están regulados de manera inadecuada, hay que reformarlos; si no están regulados, hay que regularlos. Y si hay ordenanzas que, más bien, están obstaculizando, hay que eliminarlas. Hablando de cosas concretas, queremos llegar a un sistema digitalizado informático de los procesos municipales. Creo que el Municipio está para dar respuesta ágil. No puede ser que los quiteños estén haciendo colas para sus trámites cuando ahora en todas partes se lo puede hacer en línea. Y debe haber una respuesta efectiva, con personal capacitado, el quiteño no puede estar yendo de un lado al otro.

Puede preverse, por las encuestas, que la conformación del Concejo será diversa. Y el Concejo ha jugado un rol importante. ¿Cómo cree que deberían afrontar esto quienes sean elegidos?

Aquí la ciudadanía debe tomar consciencia de que el Alcalde requiere de la mayoría del Concejo Municipal. La forma en que se puede contribuir con un proyecto es votando en plancha. Aquí lo que se busca es que Quito recupere su liderazgo.

Pero, más allá de eso, ¿cómo lo enfrentaría usted, de llegar, sin importar quién sea el Alcalde?

Haciéndoles notar a quienes lleguen que este es un cargo de responsabilidad, por el que hemos apostado todos. Creo que tienen que primar la razón y el equilibrio para que hagamos las cosas bien, sin sectarismos.

Usted encabeza la lista en el sur. ¿Lleva propuestas para este sector?

El proyecto del que soy parte quiere atender principalmente al sur. Incluso hemos usado una metáfora: queremos, imaginariamente, darle la vuelta al Panecillo, para que no solamente mire al norte o al centro, sino para que también mire al sur. Allá es donde más necesidades hay, donde más población existe, donde los servicios tienen que ser mejor atendidos.

Si usted entra, aunque no gane Jorge Yunda, ¿mantendría esa posición?

Absolutamente. Esa es mi obligación, mi responsabilidad, sin que eso quiera decir que no se vaya a trabajar por todo el distrito. Pero creo que, fundamentalmente, se debe atender el sur.

¿Cree que hay una deuda de la ciudad con el sur?

Sí. Haga una comparación y verá que son dos ciudades distintas. El desarrollo de toda la ciudad está en el norte y el sur está abandonado.

Entonces, ¿qué cosas específicas promovería para el sur?

Estamos pensando en una universidad pública del sur. Obviamente, eso se hace por Ley, en la Asamblea, pero creemos que el Municipio de Quito tiene mucho peso en poder presentar el proyecto. Además, poner obras municipales importantes en el sur: poner una biblioteca municipal, un teatro municipal, un hospital veterinario municipal. (ASC)

Hay que fiscalizar que no haya corrupción, que el dinero de los quiteños se maneje de una manera pulcra, sin sobreprecios”.Hay que hacer una depuración completa de las ordenanzas, para que respondan a las necesidades de la población”.