Construcción en Bellavista bajo análisis de autoridades

Espacio. El Mirador de Bellavista está ubicado en la parroquia de Iñaquito, barrio Bellavista Alto.
Espacio. El Mirador de Bellavista está ubicado en la parroquia de Iñaquito, barrio Bellavista Alto.

Hasta el Palacio Municipal llegaron los representantes de la Red de Barrios y Colectivos Urbanos ‘Es Quito’, para pedir a las autoridades la extinción de la licencia de un proyecto inmobiliario. La obra se ubica sobre el túnel Guayasamín.

María Ángel Muñoz, integrante de la Red, dice que la licencia para la construcción de tres torres de 143 departamentos se otorgó el pasado 11 de abril, según ella, en tiempo récord.

Andrés Rodríguez, presidente de RRDC arquitectos constructores, empresa encargada del proyecto, rechaza esta afirmación, pues la obtención de permisos duró nueve meses.

¿Público o privado?
Aunque los miembros de la constructora mencionan que “nunca hubo un mirador, sino un bulevar” y que el espacio es privado, Muñoz sostiene que entre 1880 y 1882 fue declarada la utilidad pública del terreno por el Municipio.

El martes, durante una sesión presidida por Gabriela Yépez, asesora del alcalde, Jorge Yunda, Pablo Sarzosa, otro miembro de la red, dijo que hace casi 40 años el barrio solicitó la construcción del mirador al Municipio, por lo tanto considera que es un espacio público.

“Lo público es el bulevar y eso no lo vamos a topar, Más bien quisiéramos mejorarlo”, aclaró Rodríguez, quien destacó que no todas las personas del barrio están en contra de la obra.

Paisaje
Los representantes de la Red argumentan que el proyecto alteraría los rasgos del paisaje. Eso, según manifestaron, violaría la Ley Metropolitana Urbanística (LMU20) que señala: “Que en los lugares de paisaje abierto y natural no se permitirá que la ubicación, el volumen y la altura limiten el campo visual y alteren los rasgos de la morfología…”.

Rodríguez manifiesta que si la propiedad es privada no hay prohibición para levantar un muro o, en este caso, las torres. Sin embargo, la gente no estaría tomando en cuenta que, el proyecto dejaría (hasta el lindero) 22 metros lineales que se convertirían en un mirador público. “Estamos cediendo esta parte del terreno”.

Inspección
Pablo Sarsoza también cuestiona el informe que señala que no hay riesgos por la obra. Él considera que eso no es así, porque la construcción está sobre el túnel Guayasamín.

EL DATO
El martes por la tarde, los miembros de la red, solicitaron un recurso de amparo en la Defensoría Pública.Técnicos de las secretarías municipales involucradas inspeccionaron ayer el lugar junto con las partes involucradas.

Con respecto a la preocupación sobre la cercanía del túnel, informaron que dicha estructura está 145 metros por debajo de la obra.

Francisco Bonifaz, ingeniero geólogo de la dirección de estudios de la Empresa Pública Metropolitana De Movilidad Y Obras Públicas (Epmmop), explicó que la implantación de una estructura como la que se construye no tendrá mayor influencia sobre el túnel.

Plazos y soluciones
Hace 10 días, los miembros de la Red solicitaron documentos que permitirían efectuar un análisis a profundidad sobre el impacto de esta construcción, pero no han obtenido respuesta.

EL DATO
La Red de Barrios y Colectivos Urbanos ‘Es Quito’ tiene miembros de sectores del norte, sur y centro. Gabriela Yépez, asesora del Alcalde, informó que, al concluir la inspección, las entidades municipales se han trazado una meta para que, hasta mañana, cada una emita un informe.

“No estamos en capacidad, en este preciso momento, de emitir un criterio de quién tiene la razón o qué mismo es lo que ha sucedido. Necesitamos hacer un análisis responsable de la documentación para que la decisión de la administración pueda ser sostenida en el tiempo”, agregó.

Aunque los vecinos pidieron que la obra se suspenda, mientras se analiza el caso, Carlos Játiva, miembro de la Agencia Metropolitana de Control (AMC) informó que mientras la constructora tenga la licencia, los trabajos no se pueden parar. (AVV).