Se logró bajar el exceso en un 40%, pero las cifras siguen más altas que lo normal.
CRÉDITO: SOFÍA MARTÍNEZ, ESTUDIANTE DE LA USFQ
Una de las consecuencias de la emergencia del Covid-19 en Quito ha sido la elevación en el consumo de agua.
El gerente de Operaciones de la Empresa Municipal de Agua Potable (Epmaps), Juan Fernando Robalino, confirma que, en sectores del extremo sur, como Chillogallo y Guamaní, y del extremo norte, como Carapungo y Calderón, llegaron a consumir valores de hasta 2 y 3 veces más que valor normal. “Con la campaña que se hizo para el consumo responsable, se ha logrado bajar un 40% de ese valor en exceso. Sin embargo, todavía tenemos volúmenes altos de consumo”.
Esto está afectando a algunos barrios, como Los Cóndores, en el sur: “Ha habido algunas casas con agua de forma intermitente”, explica Graciela Molina, moradora del sector.
2,5% del agua en el planeta es dulce.La cuarentena y las restricciones a la movilidad han jugado un rol en esta situación. Gabriela Proaño, ingeniera ambiental, lo expone así: “Hay un mayor consumo energético, hay mayor permanencia de la gente en los hogares y eso implica un mayor consumo de agua”. Y agrega que también pesa la falta de conciencia general de la población.
Una ciudad como Quito necesita apenas 5,5 metros cúbicos por segundo de agua y un consumo aproximado de 150 litros por persona al día. Sin embargo, el subgerente general de la Epmaps, Diego Meneses, indica que normalmente se consumen 7,65 metros cúbicos por segundo, que se traducen en más de 200 litros por persona al día.
Cuestión de información
La gerente de la consultora ambiental IQ Consultores, Valeria Cadena, menciona que la escasez de agua se debe al nivel de información y consciencia “bastante bajo” de la población. Como consecuencia, los quiteños no “valoran este proceso tanto de captación, conducción, potabilización, distribución y recolección del agua”.
1.100 millones de personas carecen de acceso al agua potable.Según el Consorcio para el Desarrollo Sostenible de la Ecorregión Andina, las incidencias humanas, como las actividades agropecuarias, han llevado al deterioro de los páramos. Por ende, existe la posibilidad de que el recurso se agote.
El subgerente de la Epmaps comenta que se podría utilizar el agua de mar, pero con limitaciones. “Pero es carísimo”. Apunta que llegar a esos extremos sería “terrible” y subraya que la detención de este fenómeno “depende de nosotros”.
“El fenómeno climático está afectando a los glaciares o a los picos altos desde los que estamos captando agua, como el Antisana o el Cotopaxi”.
Diego Meneses, subgerente de la Epmaps.
Recomendaciones
Para conservar el agua
- Regar el jardín en la noche, para evitar quemar las plantas con el calor del sol y no consumir el doble de agua.
- Lavar un vehículo con baldes y no con manguera.
- Para lavarnos los dientes basta con un vaso que contenga menos de 100 mililitros.
- Recoger el agua que cae de la ducha mientras esperamos a que se caliente para regar las plantas o darle otros usos.
- No tirar aceite por el desagüe ni ningún líquido que pueda contaminar el agua.
- No ducharse por más de 5 minutos.
- Tratar de recolectar el agua de la lluvia para darle uso.
- Enjabonarse las manos apropiadamente con la llave cerrada y solo utilizarla para enjuagarse correctamente.