El terremoto los deja en casas improvisadas

Problema. Algunos moradores del sector La Chorrera aún viven en carpas improvisadas.
Problema. Algunos moradores del sector La Chorrera aún viven en carpas improvisadas.

El impacto del terremoto continúa en varios habitantes de la comunidad ‘La Chorrera’, ubicada en la vía Pedernales-Jama, donde aún hay familias que habitan en casas improvisadas con plásticos o lonas deterioradas.

Tres años en el olvido de las autoridades, eso es lo que sienten algunos pobladores de este sector. La ayuda ofertada por el Ejecutivo no ha llegado para todos, y actualmente aún se aprecian a ciudadanos que viven en condiciones deplorables.

Geovanny Morales se dedica a la pesca para poder ganarse el pan diario, sin embargo, esta actividad no le alcanza para edificar una casa digna. La urgencia por tener un lugar donde vivir lo obligó a asentarse en un lote baldío; e improvisar su hábitat en base a palos y plásticos, elementos que reflejan un notorio deterioro.

Los ojos se le marchitan y su voz se apaga al contar las peripecias que ha debido afrontar desde el 16 de abril de 2016, día en el que perdió sus bienes “son momentos muy duros. La ayuda no ha llegado para todos, mi padre también vive en paredes de plástico”, expresó Morales.

Situación similar atraviesa Johana Zambrano, joven que ha sufrido mucho desde que perdió el lugar donde vivía. Ella no ha podido acceder a una de las viviendas que ha dado el Gobierno y de apoco pierde las esperanzas de ser una de las beneficiarias “solo los que vivimos así sabemos el dolor que se siente. Confió en Dios que pronto nos cambie la suerte”.

Problemas

La carencia de los servicios básicos es otro dolor de cabeza para las familias que no tienen casa, quienes semanalmente deben pagar 5 dólares para que los tanqueros puedan abastecerlos de agua. (JD)

“Sufrimos mucho, sobre todo cuando llueve porque el agua nos moja lo poco que tenemos”.

Johana Zambrano

Habitante de la Chorrera