De la penitenciaria a su propio microemprendimiento

Personaje. Diego Leones se convirtió en un microempresario.
Personaje. Diego Leones se convirtió en un microempresario.
Objetos.  Varias artesanías y adornos para el hogar realiza con sus manos.
Objetos. Varias artesanías y adornos para el hogar realiza con sus manos.
Arte. Realizar los productos le toma de uno a dos días.
Arte. Realizar los productos le toma de uno a dos días.

La vida de Diego Leones cambió cuando salió de la cárcel y empezó a trabajar como artesano. Hoy tiene su propio negocio.

Fue detenido por el delito de tráfico de drogas y sentenciado a dos años en prisión, tiempo en el cuál desarrolló la habilidad de crear objetos a base en bambú y reciclaje de conchas de coco. Apenas recuperó la libertad armó su taller de artesanías, emprendimiento que le permite aportar económicamente en el hogar y la educación de sus cuatro hijos.

Las manos de Diego Leones se convirtieron en su arma de negocio, de trabajo y de crecimiento. Con ellas da vida a portaservilletas, alcancías, azucareros, saleros, portalápices, adornos decorativos, llaveros, pipas y todo aquello que los clientes puedan imaginar.

“No se encuentra trabajo por estos días y peor cuando uno ha estado en prisión, las personas viven con prejuicios y cierran muchas puertas pensando que no somos personas de bien quienes cumplimos condenas por errores de la vida y malas decisiones”, contentó.

Lleva tres años desarrollando su idea de negocio en su taller, ubicado en la urbanización Los Rosales tercera etapa, un espacio que le dio su suegro para crear el producto. Para ofertarlo aprovecha las ferias, donde sus creaciones no pasan desapercibidas, entre ellas está una lámpara con forma de palma de coco, formada con 10 mil fichas de revista reciclada, puro papel, prácticamente.

Las más vendidas son las alcancías, algunas tienen impregnadas figuras infantiles para los niños y otras son talladas con formas diversas y distintos diseños. Los adornos de oficina son los preferidos, al igual que aquellos que cumplen la función de ordenar objetos.

“Puedes colocar tarjetas de presentación, esferos, incluso el celular para tenerlo a la vista cuando estás en la oficina”, menciona.

Los precios de sus artesanías varían, se encuentran adornos desde 2 dólares hasta los 30 dólares, todo depende el grado de complejidad en su elaboración, así como el tratamiento del bambú.

El bambú reciclado lo consigue en las construcciones, le pide a los maestros que ya lo han desechado, si lo puede llevar y lo traslada a su taller. Luego viene el proceso para sanar la materia prima.

Después se coloca barniz o pintura de vidrio para dar el acabado final a cada producto, el decorado es hecho con un pirograbado, donde se da forma a diferentes figuras que realzan a la obra. (DA)

Anhelos

Diego quiere crecer, aspira que empresas realicen pedidos al por mayor y así poder dar empleo a más personas para que se alejen de las cosas que alguna vez lo pusieron tras las rejas. “Gracias a Dios ahora hago cosas buenas, espero seguir creciendo con el apoyo de todos”, exclamó.

Tome nota

Para mayor información sobre su trabajo o hacer pedidos puede comunicarse al número telefónico 09 89 73 81 33.