La parrilla une familias e integra a amigos

COMPARTIR. La Parrilla une amigos, familias y compañeros. Buscan ser un lugar comunitario.
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Los fines de semana es común escuchar propuestas de integrantes de la familia o del grupo de amigos para hacer asados y precisamente la idea es unir a los seres queridos en un disfrute de un buen corte de carne, con charlas, recuerdos y mucho más.

Wagner Vélez, gerente propietario de ‘La Parrilla’ comenta que desde la antigüedad, por supervivencia el hombre cazaba y ponía sobre las piedras para poder preparar la carne de los animales, esta práctica ha venido evolucionando “y ya en la época de los vikingos nacieron los asados y dando forma a la preparación de la carne sobre unos fierros llamados parrillas. Esto llegó a Ecuador a mediados de los años 50 y a Santo Domingo en el 1978 con nuestros hermanos argentinos”, relata Vélez.

“El concepto de la parrilla integra amigos, une familias y sobretodo se comparte que es lo más importante”, enfatiza el amante de esta actividad.

Para Wagner Vélez es algo enriquecedor y sería excelente que en todos los hogares hubiese una parrilla, no tiene que ser de lujo, expresa que su primera parrilla fue colocar dos bloques, poner carbón y unas rejas que tenía su mamá. “Es más cuestión de amor a este arte”.

Pasión

Algo que caracteriza este arte es que la mayoría es preparada por hombres, quienes han encontrado en la parrilla una pasión. Se necesita un espacio abierto y las familias gustan de un sitio algo campestre para deslindarse del estrés del trabajo, la ciudad, el celular, los pendientes y disfrutar del ambiente de la naturaleza con los más queridos.

Ahora, relata Vélez, hace unos dos años se ha dado un boom parrillero en el país, siendo Santo Domingo un eje importante donde se han desarrollado varios emprendimientos y ahora se busca denominar a la provincia Tsáchila como la ‘Capital de la carne’ de Ecuador. (VG)

Sobre él

Wagner Vélez es el gerente propietario de ‘La Parrilla’, un emprendimiento que está hace seis meses atendiendo al público. Él empezó con este gusto desde los 12 años. Luego empezó a hacer consultorías en el tema de la carne y es un apasionado de esta actividad. Comenta que han conformado un club parrillero en Santo Domingo y esperan hacer un tour parrillero, además de ser parte de la Asociación de Parrilleros de Carne de Ecuador.

Los fines de semana es común escuchar propuestas de integrantes de la familia o del grupo de amigos para hacer asados y precisamente la idea es unir a los seres queridos en un disfrute de un buen corte de carne, con charlas, recuerdos y mucho más.

Wagner Vélez, gerente propietario de ‘La Parrilla’ comenta que desde la antigüedad, por supervivencia el hombre cazaba y ponía sobre las piedras para poder preparar la carne de los animales, esta práctica ha venido evolucionando “y ya en la época de los vikingos nacieron los asados y dando forma a la preparación de la carne sobre unos fierros llamados parrillas. Esto llegó a Ecuador a mediados de los años 50 y a Santo Domingo en el 1978 con nuestros hermanos argentinos”, relata Vélez.

“El concepto de la parrilla integra amigos, une familias y sobretodo se comparte que es lo más importante”, enfatiza el amante de esta actividad.

Para Wagner Vélez es algo enriquecedor y sería excelente que en todos los hogares hubiese una parrilla, no tiene que ser de lujo, expresa que su primera parrilla fue colocar dos bloques, poner carbón y unas rejas que tenía su mamá. “Es más cuestión de amor a este arte”.

Pasión

Algo que caracteriza este arte es que la mayoría es preparada por hombres, quienes han encontrado en la parrilla una pasión. Se necesita un espacio abierto y las familias gustan de un sitio algo campestre para deslindarse del estrés del trabajo, la ciudad, el celular, los pendientes y disfrutar del ambiente de la naturaleza con los más queridos.

Ahora, relata Vélez, hace unos dos años se ha dado un boom parrillero en el país, siendo Santo Domingo un eje importante donde se han desarrollado varios emprendimientos y ahora se busca denominar a la provincia Tsáchila como la ‘Capital de la carne’ de Ecuador. (VG)

Sobre él

Wagner Vélez es el gerente propietario de ‘La Parrilla’, un emprendimiento que está hace seis meses atendiendo al público. Él empezó con este gusto desde los 12 años. Luego empezó a hacer consultorías en el tema de la carne y es un apasionado de esta actividad. Comenta que han conformado un club parrillero en Santo Domingo y esperan hacer un tour parrillero, además de ser parte de la Asociación de Parrilleros de Carne de Ecuador.

Los fines de semana es común escuchar propuestas de integrantes de la familia o del grupo de amigos para hacer asados y precisamente la idea es unir a los seres queridos en un disfrute de un buen corte de carne, con charlas, recuerdos y mucho más.

Wagner Vélez, gerente propietario de ‘La Parrilla’ comenta que desde la antigüedad, por supervivencia el hombre cazaba y ponía sobre las piedras para poder preparar la carne de los animales, esta práctica ha venido evolucionando “y ya en la época de los vikingos nacieron los asados y dando forma a la preparación de la carne sobre unos fierros llamados parrillas. Esto llegó a Ecuador a mediados de los años 50 y a Santo Domingo en el 1978 con nuestros hermanos argentinos”, relata Vélez.

“El concepto de la parrilla integra amigos, une familias y sobretodo se comparte que es lo más importante”, enfatiza el amante de esta actividad.

Para Wagner Vélez es algo enriquecedor y sería excelente que en todos los hogares hubiese una parrilla, no tiene que ser de lujo, expresa que su primera parrilla fue colocar dos bloques, poner carbón y unas rejas que tenía su mamá. “Es más cuestión de amor a este arte”.

Pasión

Algo que caracteriza este arte es que la mayoría es preparada por hombres, quienes han encontrado en la parrilla una pasión. Se necesita un espacio abierto y las familias gustan de un sitio algo campestre para deslindarse del estrés del trabajo, la ciudad, el celular, los pendientes y disfrutar del ambiente de la naturaleza con los más queridos.

Ahora, relata Vélez, hace unos dos años se ha dado un boom parrillero en el país, siendo Santo Domingo un eje importante donde se han desarrollado varios emprendimientos y ahora se busca denominar a la provincia Tsáchila como la ‘Capital de la carne’ de Ecuador. (VG)

Sobre él

Wagner Vélez es el gerente propietario de ‘La Parrilla’, un emprendimiento que está hace seis meses atendiendo al público. Él empezó con este gusto desde los 12 años. Luego empezó a hacer consultorías en el tema de la carne y es un apasionado de esta actividad. Comenta que han conformado un club parrillero en Santo Domingo y esperan hacer un tour parrillero, además de ser parte de la Asociación de Parrilleros de Carne de Ecuador.

Los fines de semana es común escuchar propuestas de integrantes de la familia o del grupo de amigos para hacer asados y precisamente la idea es unir a los seres queridos en un disfrute de un buen corte de carne, con charlas, recuerdos y mucho más.

Wagner Vélez, gerente propietario de ‘La Parrilla’ comenta que desde la antigüedad, por supervivencia el hombre cazaba y ponía sobre las piedras para poder preparar la carne de los animales, esta práctica ha venido evolucionando “y ya en la época de los vikingos nacieron los asados y dando forma a la preparación de la carne sobre unos fierros llamados parrillas. Esto llegó a Ecuador a mediados de los años 50 y a Santo Domingo en el 1978 con nuestros hermanos argentinos”, relata Vélez.

“El concepto de la parrilla integra amigos, une familias y sobretodo se comparte que es lo más importante”, enfatiza el amante de esta actividad.

Para Wagner Vélez es algo enriquecedor y sería excelente que en todos los hogares hubiese una parrilla, no tiene que ser de lujo, expresa que su primera parrilla fue colocar dos bloques, poner carbón y unas rejas que tenía su mamá. “Es más cuestión de amor a este arte”.

Pasión

Algo que caracteriza este arte es que la mayoría es preparada por hombres, quienes han encontrado en la parrilla una pasión. Se necesita un espacio abierto y las familias gustan de un sitio algo campestre para deslindarse del estrés del trabajo, la ciudad, el celular, los pendientes y disfrutar del ambiente de la naturaleza con los más queridos.

Ahora, relata Vélez, hace unos dos años se ha dado un boom parrillero en el país, siendo Santo Domingo un eje importante donde se han desarrollado varios emprendimientos y ahora se busca denominar a la provincia Tsáchila como la ‘Capital de la carne’ de Ecuador. (VG)

Sobre él

Wagner Vélez es el gerente propietario de ‘La Parrilla’, un emprendimiento que está hace seis meses atendiendo al público. Él empezó con este gusto desde los 12 años. Luego empezó a hacer consultorías en el tema de la carne y es un apasionado de esta actividad. Comenta que han conformado un club parrillero en Santo Domingo y esperan hacer un tour parrillero, además de ser parte de la Asociación de Parrilleros de Carne de Ecuador.