Recostado detrás de una banca junto a una botella de licor, fue descubierto la mañana de ayer el cuerpo de Jorge Bolívar P., de 48 años.
Un morador del barrio Central de Izamba fue quien observó la escena, por lo que de inmediato se comunicó con el Servicio Integrado de Seguridad.
Paramédicos del Ministerio de Salud fueron quienes dieron la noticia que la persona ya no tenía signos vitales, por lo que fue indispensable la presencia de la Policía Nacional para las investigaciones.
Procedimiento
A la escena llegó personal de la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) de Izamba, quienes acordonaron el área, también arribaron los peritos de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) y Criminalística, quienes al revisar el cuerpo vieron que no tenia huellas de violencia, pero sí residuos de comida en su boca, por lo que se presume se atragantó con su propio vómito.
El cuerpo fue cubierto con una funda plástica hasta el recogimiento de evidencias que ayuden a determinar la posible causa del deceso de Jorge.
El cadáver fue levantado y trasladado hasta el Centro de Investigaciones Forenses de Ambato.
Familiares
Según mencionó Laura M., tía del occiso, su sobrino estaba deprimido, pues su padre murió hace un año y su madre hace un año y medio, lo que le habría llevado a beber demasiado.
La tía también mencionó que hace unos 15 días lo vieron por última vez, ya que fue la misa de honras del papá, por el año de fallecimiento.
Héctor Valle, amigo de Jorge, contó que vivía cerca del partidero a Píllaro y trabajaba en una fábrica de zapatos y en un local de embutidos.
Valle dijo que los conocidos y allegados lo trataban por el apodo de ‘Chullo Bolo’, a quien lo recuerdan como una persona alegre y caritativa.
“Quizás su defecto fue que le gustaba tomar y penosamente en este sitio hay lugares clandestinos que venden licor artesanal”, finalizó Valle.
Autoridad
Fabricio Salinas, teniente Político de Izamba, mencionó que es una lucha constante la que tienen para contrarrestar la venta de licor artesanal.
“A pesar que está prohibida la venta de esta bebida existen casas donde se expende libremente y para poder ingresar a una de estas propiedades con la Policía Nacional se debe tener una boleta de allanamiento”, reveló Salinas.
El Teniente Político dijo que se ha descubierto que los propietarios de estas tiendas entierran el licor en los cultivos con el fin de que no sean decomisados. (EV)