Se cambia corona por curul

Hace unos días salió una nota periodística de este diario, que nos daba ha conocer la docena de candidatas a concejalas que habían sido parte de la “realeza” en concursos de belleza, de varios cantones de la provincia y que ahora buscan lanzarse a la lid electoral, tal vez esperando el mismo impulso con el que ganaron sus coronas en temporadas pasadas.

Todos tenemos el derecho a ejercer nuestros derechos de participación, lo más importante es cumplir con la condición de representatividad, el ser parte de un grupo social, que tiene que estar ‘presente’ en los actos de legislación. ¿Lo son?

A pesar de los análisis de corto alcance de algunos analistas, creo que, aunque hay cierto grado de responsabilidad en aceptar ser candidata/o para un cargo para el cual no se está preparado y, que los partidos políticos usen la fama, como herramienta electoral; pues recomendados por sus consultores de campaña, lo más importante no es la intención de voto, sino el grado de conocimiento en la sociedad que tenga el candidato, lo que se ahorran con una cara mediática. Yo estoy convencido que es un problema estructural, que no se soluciona con el trillado argumento de la “cultura política”, sino con una reforma al código de la democracia.

El sistema electoral actual, castiga a la diversidad ideológica, con un método de asignación de escaños, que fortalece al sistema de partidos, pero lo mezclamos con las listas abiertas. Necesitamos un sistema que, preservando la posibilidad de elegir tus candidatos entre listas, de representatividad a los diferentes sectores políticos, usando el método de Webster, que es un sistema que daría mayor proporcionalidad de la que tiene actualmente el sistema electoral. También la exigencia de porcentajes para mantener la inscripción al registro electoral limita el ejercicio democrático, desde cualquier punto de vista. Si los partidos no tuvieran que preocuparse tanto por lograr los porcentajes electorales exigidos por la ley, para conservar su numero y no desaparecer; estoy convencido que pondrían más candidatos de sus estructuras internas, lo que fortalecería los procesos de capacitación interna dándonos mejores candidatos.