Juego estimula la memoria de niños con síndrome de Down

Aporte. Eduardo Navas, docente a investigador, explica cómo funciona la aplicación.
Aporte. Eduardo Navas, docente a investigador, explica cómo funciona la aplicación.

Sentado junto a su madre, Miguel (nombre protegido), quien tiene síndrome de Down como nunca, en esta ocasión centra toda su atención en un juego en la ‘tablet’.

Se trata de un juego interactivo que permite incrementar la atención y retentiva visual en niños con síndrome de Down diseñado por un docente y un estudiante de la carrera de Diseño Gráfico de la Facultad de Arquitectura, Artes y Diseño, de la Universidad Tecnológica Indoamérica.

Investigación

El trabajo de investigación nació como una respuesta a la búsqueda de dar utilidad de las nuevas tecnologías de información y comunicación en la vida de las personas, sobre todo de aquellos grupos vulnerables donde poco o nada se aporta.

Es por ello que se plantearon la construcción de un juego interactivo, lúdico y didáctico para trabajar en el aprendizaje de niños con este síndrome.

Se trata de una plataforma gráfica cuya interfaz fue diseñada utilizando especialmente elementos audiovisuales de objetos que incentivan procesos afectivos, cognoscitivos y de comportamiento.

Animales, su hábitat y su alimento son parte de este proyecto de investigación y vinculación que tomó varios meses de labor, así lo reconocen Alex Caizachana, quien desarrolló la investigación como parte del trabajo de grado bajo la tutoría de Eduardo Navas, docente investigador, quien aseguró que el juego incorpora escenarios de fácil asociación para mejorar su actividad académica.

A decir del investigador la metodología utilizada para diseñar el primer prototipo fue una encuesta realizada al total de maestros de un centro de atención para niños con síndrome de Down.

“El juego fue evaluado básicamente con 14 niños en promedio de edad de 5 a 11 años, se realizó un análisis cuantitativo con esta herramienta en el que los resultados evidencian una mejora notable en la atención y retentiva que el menor direcciona al juego, logrando una interacción que facilita el proceso enseñanza-aprendizaje”, dijo Navas.

El juego tiene tres fases, en la primera el niño debe asociar un animal con su hábitat, en el segundo debe vincular al animal con su comida y en el tercero se enlaza al animal con su sonido característico. (FCT)