Ambato tiene 16 fallas geológicas de riesgo

Ambato tiene 16 fallas geológicas de alto riesgo, que deben ser tomadas en cuenta para evitar construir edificaciones.
Ambato tiene 16 fallas geológicas de alto riesgo, que deben ser tomadas en cuenta para evitar construir edificaciones.

Ambato tiene 16 fallas geológicas de alto riesgo, que deben ser tomadas en cuenta para evitar construir edificaciones.

Los expertos en sismología recomiendan que los gobiernos locales reduzcan la vulnerabilidad de las viviendas mediante construcciones nuevas que tengan medidas de seguridad y reforzamiento estructural en las edificaciones antiguas. Toda vez que Ambato se encuentra en una zona altamente sísmica y volcánica.

La Unidad de Gestión de Riesgos del Municipio de Ambato, creada en el 2016, cuenta con el estudio de microzonación del área urbana que permite determinar el comportamiento de los suelos frente a las ondas sísmicas.

Los resultados revelan que la ciudad tiene suelos tipo C, que son duros, fuertes y resistentes a las ondas sísmicas; además, otros suelos tipo E que son más blandos y corresponden a las quebradas convertidas en parques como: Infantil de Atocha, Automovilismo, La Cantera, José Cuesta de Ficoa, Lineal de la Quebrada Seca.

También se determina que en Ambato existen 52 fallas geológicas (fracturas en la corteza terrestre), de las cuales 16 son de peligrosidad y se ubican en diferentes sectores.

Una cruza Ficoa-Pinllo, otras en Santa Elena y Atocha, avenida Miraflores baja los molinos y termina en la calle Pérez de Anda; otra atraviesa Huachi Chico, la falla El Dorado cruza la quebrada de Terremoto; una existe en la parroquia Celiano Monge, en la parroquia La Península existen dos fallas; también se localizan dos en Pishilata (loma de Pasochoa), una cruza Picaihua y otra Izamba; desde la parroquia Santa Rosa una falla cruza el Casigana, Miraflores, Ficoa, Pinllo y llega hasta Ambatillo. También existe una falla geológica en Totoras.

Héctor Cobo, director de la Unidad de Gestión de Riesgos del Municipio de Ambato, dijo que las fallas geológicas están activas y los eventos adversos son cíclicos. En el caso del volcán Tungurahua se sabe que erupciona cada 100 años y según estudios geológicos un sismo relacionado con nuestra ciudad tiene un ritmo de recurrencia de 75 años.

Como medida de prevención, Cobo recomienda a quienes habitan en zona de alto riesgo sísmico realizar el reforzamiento estructural de las edificaciones tanto públicas como privadas, con asesoría de los profesionales (ingenieros civiles). Además, que la población se capacite sobre eventos adversos y planes de emergencia familiar.

Opinión ciudadana

La población en general no está bien informada sobre las fallas geológicas y cómo actuar ante un evento adverso.

En Ficoa varios habitantes comentaron que sería bueno tener más información. Uno de ellos, Luis Tamayo, resaltó que su casa de tres pisos es antisísmica para prevenir riesgos, toda vez que él tenía experiencia de haber vivido en Japón por seis meses y eso crea cultura de prevención.

Los esposos Teresa Vargas (81 años) y Celio Freire (85 años) indicaron que su vivienda ubicada en la avenida Los Guaytambos, resistiría a un gran sismo porque tiene estructura de piedra pishilata, material que se ocupaba en la antigüedad. La casa había soportado el terremoto de 1949.

Wilson Pinto, morador de La Península por donde cruzan dos fallas geológicas, sostuvo que esta zona es sensible a los movimientos de la tierra como los temblores. Adicionalmente han sido afectados por la explotación minera que han dejado secuelas en las vías, acotó.

Reforzamiento estructural

El ingeniero civil Roberto Supe explicó que el reforzamiento estructural debe hacerse en forma particular para edificaciones o viviendas, según los elementos estructurales que podrían ser afectados con fisuras o grietas, tomando en cuenta los cimientos, columnas, cadenas estructurales, vigas o lozas.

Como ejemplo, el reforzamiento estructural de una vivienda de un piso de hormigón armado construida en un área de 100 m2, si resultase afectada con fisuras tendría un costo aproximado de 700 dólares por cada piso.

Supe recalcó que los valores son estimados, todo dependerá si la vivienda ha sido construida con permiso municipal o no. Las personas deben asesorarse con el proyectista de su obra (ingeniero civil o arquitecto) para revisar el diseño estructural para trabajar en base a las Normas Ecuatorianas de la Construcción NEC 2015.

Habrá casos que una vivienda no cumpla las normas de construcción y tenga que ser derrocada para hacer una nueva. (SAE)

Ordenanza Gestión de Riesgos

“Dentro del proceso de planificación de la ciudad debe considerarse la gestión de riesgos para mitigar eventos adversos, a pesar que no existe una ley de Gestión de Riesgos a nivel nacional ni una Ordenanza local sobre este tema”, destacó Héctor Cobo, director de la Unidad de Gestión de Riesgos.

La unidad municipal se encuentra trabajando en un borrador de Ordenanza para presentar al Comseca y Concejo Cantonal en los próximos días.

TOME NOTA

El estudio de microzonación del área urbana inició en 2017 y concluyó en febrero de 2019 a cargo de Planificación y Obras Públicas Municipales.