Piden el archivo de ordenanza municipal que gestiona el uso del espacio público

Informalidad. El comercio autónomo es uno de los puntos más conflictivos a tratarse en la ciudad.
Informalidad. El comercio autónomo es uno de los puntos más conflictivos a tratarse en la ciudad.

“Nosotros estamos pagando impuestos y es inaudito que ahora se quiera legalizar la informalidad cuando lo que queremos es tener una ciudad limpia y ordenada”, señaló Fátima C., quien vende por más de 10 años en la plaza Urbina.

Como ella existen un sinnúmero de comerciantes que aseguran que con la Ordenanza que establece la convivencia y el respeto mediante la regulación y el control en la ocupación de los bienes de uso público en Ambato, propuesta por el concejal Robinson Loaiza y aprobada en primera instancia el pasado 16 de julio, se dará paso al incremento de cánones, así como la ‘legalización’ del comercio autónomo.

Dirigencia

Mario Mayorga, presidente de las Asociaciones de Comerciantes del mercado Mayorista y coordinador nacional de la Confederación Unitaria de Comerciantes Minoristas y Trabajadores Autónomos del Ecuador, dijo que la Ordenanza planteada como tal genera inestabilidad en los sitios de trabajo al autorizar que se ocupe la vía pública pagando ciertos valores lo que les permitiría a los comerciantes ubicarse en cualquier parte de la calle.

Señaló que del mismo modo se da la posibilidad de que pagando dos dólares puedan ubicarse con libertad los vendedores ambulantes. “Esto va a provocar una confrontación entre los vendedores que laboran dentro de las plazas y mercados con los comerciantes autónomos”, puntualizó el dirigente gremial.

Otro de los puntos en lo que ven inconvenientes puntualizados por Mayorga es que se va a autorizar a los frentistas de las viviendas para que ellos paguen 0,50 centavos por metro cuadrado y cuando hayan desfiles puedan armar tarimas, lo que implicaría que se impida que la gente que llegue de otros sectores de la ciudad puedan hacer uso, de manera gratuita, del espacio público para disfrutar de dichos espectáculos.

Por su parte Luis Yansaguano, gerente del mercado Mayorista Ambato, dijo que la institución al ser empresa pública desde 2010 cuenta con su propia ordenanza de funcionamiento, por lo que la propuesta hecha por el edil Loaiza no afectaría de manera directa a la institución y su funcionamiento.

Añadió que eso no implica que no deba hacerse el tratamiento de la normativa planteada con los diferentes actores involucrados, para que se obtenga un documento que le permita a la ciudad crecer de manera equitativa y ordenadamente.

Proponente

Mientras tanto Robinson Loaiza, proponente de la Ordenanza, señaló que bajo ninguna circunstancia se ha querido implantar el desorden o regularizar la informalidad, por el contrario lo que se busca es ordenar la ciudad.

Señaló que se está haciendo un análisis para ver quiénes son los comerciantes informales que laboran en las calles de la ciudad, así como cuáles son sus giros de negocio, su realidad socio – económica para con esos datos potencializar su trabajo de manera ordenada en sitios y lugares establecidos para esta actividad.

Recalcó que si bien es cierto que para que la Ordenanza que establece la convivencia y el respeto mediante la regulación y el control en la ocupación de los bienes de uso público en el cantón Ambato entre en funcionamiento deben derogarse otras ordenanzas ya en vigencia, en ningún momento se afecta al mercado Mayorista por ser esta una empresa pública regida por su propia normativa.

Loaiza comentó que con este proyecto se seguirá socializando con todos los sectores involucrados para poder general una normativa que le permita a Ambato ser una ciudad que genere crecimiento y opciones de empleo sin dañar su imagen o generando desorden.

En lo que todos los involucrados coincidieron que este no es solo un trabajo de normativa, pues debe venir desde la misma colectividad el respeto y la cultura de hacer las compras dentro de los mercados y no en los derredores de estos dando paso a una competencia desleal. (NVP)