Quitocucho en Pelileo está de luto

Angustia. Amigos y vecinos estaban en las afueras del Hospital Básico de Pelileo a la espera del levantamiento del cadáver.
Angustia. Amigos y vecinos estaban en las afueras del Hospital Básico de Pelileo a la espera del levantamiento del cadáver.
Angustia. Amigos y vecinos estaban en las afueras del Hospital Básico de Pelileo a la espera del levantamiento del cadáver.
Angustia. Amigos y vecinos estaban en las afueras del Hospital Básico de Pelileo a la espera del levantamiento del cadáver.
Angustia. Amigos y vecinos estaban en las afueras del Hospital Básico de Pelileo a la espera del levantamiento del cadáver.
Angustia. Amigos y vecinos estaban en las afueras del Hospital Básico de Pelileo a la espera del levantamiento del cadáver.
Angustia. Amigos y vecinos estaban en las afueras del Hospital Básico de Pelileo a la espera del levantamiento del cadáver.
Angustia. Amigos y vecinos estaban en las afueras del Hospital Básico de Pelileo a la espera del levantamiento del cadáver.

Un joven de 18 años murió la tarde de ayer tras volcarse con su motocicleta en el cantón.

Con el rostro lleno de lágrimas, la mirada perdida, las manos temblorosas y sin poder pronunciar palabra alguna Marlene salió del sector de Emergencia del Hospital Básico de Pelileo.

La mujer estaba visiblemente desmoronada ante la pérdida de su hijo mayor Ronnie Gabriel T., quien la tarde de ayer tuvo un accidente de tránsito que le costó la vida.

Los hechos

“La ley de la vida es que los padres nos vayamos antes que nuestros hijos, así que debe ser insoportable tener que decirle adiós a alguien a quien le hemos dado la vida”, decía Rocío, vecina de la familia afectada, quien también los acompañó hasta la casa de salud.

Según testigos del hecho, Ronnie estaba yendo al barrio Luz de América en Quitocucho de la parroquia Bolívar de San Pedro de Pelileo a bordo de su motocicleta, pues en ese sector estaba su casa, sin embargo, en el barrio centro al parecer habría perdido el control del vehículo y se volcó.

El golpe fue tan grande que el joven de tan solo 18 años habría perdido la vida de contado luego del siniestro.

Uno de los vecinos que estaba cerca y escuchó el ruido que causó el volcamiento de la moto de inmediato se comunicó con los familiares del joven quienes pidieron ayuda al ECU 911 para que lo socorra y lo trasladen hasta el Hospital, pero en la casa de salud solo confirmaron que ya no tenía signos vitales.

El hecho se habría producido a eso de las 13:30 y su muerte se declaró ya a las 14:00. Hasta el lugar llegó personal del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) Tungurahua, quienes en presencia del Fiscal de turno realizaron el levantamiento del cadáver para posteriormente trasladarlo hasta el Centro Forense de Ambato para practicarle la autopsia de ley.

Del mismo modo fueron hasta el lugar donde ocurrió el accidente para determinar las causas del mismo y así poder saber qué fue lo que pasó para que Ronnie perdiera el control de su motocicleta.

Su historia

Entre los amigos, compañeros de colegio y vecinos que lo conocían comentaban que el joven recién se había graduado en el periodo lectivo 2018-2019 y que ahora estaba siguiendo un preuniversitario para poder alcanzar el puntaje necesario que le permita estudiar la universidad en una de las ramas de la medicina, pues ese era su sueño.

Entendían que su familia estuviese devastada pues él era el mayor de tres hijos y el ‘Guagua Pedrito’ como le decían en honor a su padre Pedro, era un referente de responsabilidad, atención y dedicación en su comunidad, pues jamás se lo conoció con vicios y siempre estaba ayudando a sus padres a trabajar en la agricultura.

Mientras esperaban a que se ejecuten los trámites de ley varias vecinas y familiares del joven con una chalina y en medio de plegarias y agradecimientos pedían colaboración para poder ayudar al hogar de Marlene y Pedro en este momento de dolor.

Ahora quienes conocieron a Ronnie esperan que su ejemplo sea perenne y pueda acompañar a sus padres y hermanitos que con el alma en mil pedazos deberán darle el último adiós. (NVP)

300

Personas

Aproximadamente, se apostaron en las afueras de emergencia del Hospital Básico de Pelileo para apoyar a la familia del occiso.

Un joven de 18 años murió la tarde de ayer tras volcarse con su motocicleta en el cantón.

Con el rostro lleno de lágrimas, la mirada perdida, las manos temblorosas y sin poder pronunciar palabra alguna Marlene salió del sector de Emergencia del Hospital Básico de Pelileo.

La mujer estaba visiblemente desmoronada ante la pérdida de su hijo mayor Ronnie Gabriel T., quien la tarde de ayer tuvo un accidente de tránsito que le costó la vida.

Los hechos

“La ley de la vida es que los padres nos vayamos antes que nuestros hijos, así que debe ser insoportable tener que decirle adiós a alguien a quien le hemos dado la vida”, decía Rocío, vecina de la familia afectada, quien también los acompañó hasta la casa de salud.

Según testigos del hecho, Ronnie estaba yendo al barrio Luz de América en Quitocucho de la parroquia Bolívar de San Pedro de Pelileo a bordo de su motocicleta, pues en ese sector estaba su casa, sin embargo, en el barrio centro al parecer habría perdido el control del vehículo y se volcó.

El golpe fue tan grande que el joven de tan solo 18 años habría perdido la vida de contado luego del siniestro.

Uno de los vecinos que estaba cerca y escuchó el ruido que causó el volcamiento de la moto de inmediato se comunicó con los familiares del joven quienes pidieron ayuda al ECU 911 para que lo socorra y lo trasladen hasta el Hospital, pero en la casa de salud solo confirmaron que ya no tenía signos vitales.

El hecho se habría producido a eso de las 13:30 y su muerte se declaró ya a las 14:00. Hasta el lugar llegó personal del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) Tungurahua, quienes en presencia del Fiscal de turno realizaron el levantamiento del cadáver para posteriormente trasladarlo hasta el Centro Forense de Ambato para practicarle la autopsia de ley.

Del mismo modo fueron hasta el lugar donde ocurrió el accidente para determinar las causas del mismo y así poder saber qué fue lo que pasó para que Ronnie perdiera el control de su motocicleta.

Su historia

Entre los amigos, compañeros de colegio y vecinos que lo conocían comentaban que el joven recién se había graduado en el periodo lectivo 2018-2019 y que ahora estaba siguiendo un preuniversitario para poder alcanzar el puntaje necesario que le permita estudiar la universidad en una de las ramas de la medicina, pues ese era su sueño.

Entendían que su familia estuviese devastada pues él era el mayor de tres hijos y el ‘Guagua Pedrito’ como le decían en honor a su padre Pedro, era un referente de responsabilidad, atención y dedicación en su comunidad, pues jamás se lo conoció con vicios y siempre estaba ayudando a sus padres a trabajar en la agricultura.

Mientras esperaban a que se ejecuten los trámites de ley varias vecinas y familiares del joven con una chalina y en medio de plegarias y agradecimientos pedían colaboración para poder ayudar al hogar de Marlene y Pedro en este momento de dolor.

Ahora quienes conocieron a Ronnie esperan que su ejemplo sea perenne y pueda acompañar a sus padres y hermanitos que con el alma en mil pedazos deberán darle el último adiós. (NVP)

300

Personas

Aproximadamente, se apostaron en las afueras de emergencia del Hospital Básico de Pelileo para apoyar a la familia del occiso.

Un joven de 18 años murió la tarde de ayer tras volcarse con su motocicleta en el cantón.

Con el rostro lleno de lágrimas, la mirada perdida, las manos temblorosas y sin poder pronunciar palabra alguna Marlene salió del sector de Emergencia del Hospital Básico de Pelileo.

La mujer estaba visiblemente desmoronada ante la pérdida de su hijo mayor Ronnie Gabriel T., quien la tarde de ayer tuvo un accidente de tránsito que le costó la vida.

Los hechos

“La ley de la vida es que los padres nos vayamos antes que nuestros hijos, así que debe ser insoportable tener que decirle adiós a alguien a quien le hemos dado la vida”, decía Rocío, vecina de la familia afectada, quien también los acompañó hasta la casa de salud.

Según testigos del hecho, Ronnie estaba yendo al barrio Luz de América en Quitocucho de la parroquia Bolívar de San Pedro de Pelileo a bordo de su motocicleta, pues en ese sector estaba su casa, sin embargo, en el barrio centro al parecer habría perdido el control del vehículo y se volcó.

El golpe fue tan grande que el joven de tan solo 18 años habría perdido la vida de contado luego del siniestro.

Uno de los vecinos que estaba cerca y escuchó el ruido que causó el volcamiento de la moto de inmediato se comunicó con los familiares del joven quienes pidieron ayuda al ECU 911 para que lo socorra y lo trasladen hasta el Hospital, pero en la casa de salud solo confirmaron que ya no tenía signos vitales.

El hecho se habría producido a eso de las 13:30 y su muerte se declaró ya a las 14:00. Hasta el lugar llegó personal del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) Tungurahua, quienes en presencia del Fiscal de turno realizaron el levantamiento del cadáver para posteriormente trasladarlo hasta el Centro Forense de Ambato para practicarle la autopsia de ley.

Del mismo modo fueron hasta el lugar donde ocurrió el accidente para determinar las causas del mismo y así poder saber qué fue lo que pasó para que Ronnie perdiera el control de su motocicleta.

Su historia

Entre los amigos, compañeros de colegio y vecinos que lo conocían comentaban que el joven recién se había graduado en el periodo lectivo 2018-2019 y que ahora estaba siguiendo un preuniversitario para poder alcanzar el puntaje necesario que le permita estudiar la universidad en una de las ramas de la medicina, pues ese era su sueño.

Entendían que su familia estuviese devastada pues él era el mayor de tres hijos y el ‘Guagua Pedrito’ como le decían en honor a su padre Pedro, era un referente de responsabilidad, atención y dedicación en su comunidad, pues jamás se lo conoció con vicios y siempre estaba ayudando a sus padres a trabajar en la agricultura.

Mientras esperaban a que se ejecuten los trámites de ley varias vecinas y familiares del joven con una chalina y en medio de plegarias y agradecimientos pedían colaboración para poder ayudar al hogar de Marlene y Pedro en este momento de dolor.

Ahora quienes conocieron a Ronnie esperan que su ejemplo sea perenne y pueda acompañar a sus padres y hermanitos que con el alma en mil pedazos deberán darle el último adiós. (NVP)

300

Personas

Aproximadamente, se apostaron en las afueras de emergencia del Hospital Básico de Pelileo para apoyar a la familia del occiso.

Un joven de 18 años murió la tarde de ayer tras volcarse con su motocicleta en el cantón.

Con el rostro lleno de lágrimas, la mirada perdida, las manos temblorosas y sin poder pronunciar palabra alguna Marlene salió del sector de Emergencia del Hospital Básico de Pelileo.

La mujer estaba visiblemente desmoronada ante la pérdida de su hijo mayor Ronnie Gabriel T., quien la tarde de ayer tuvo un accidente de tránsito que le costó la vida.

Los hechos

“La ley de la vida es que los padres nos vayamos antes que nuestros hijos, así que debe ser insoportable tener que decirle adiós a alguien a quien le hemos dado la vida”, decía Rocío, vecina de la familia afectada, quien también los acompañó hasta la casa de salud.

Según testigos del hecho, Ronnie estaba yendo al barrio Luz de América en Quitocucho de la parroquia Bolívar de San Pedro de Pelileo a bordo de su motocicleta, pues en ese sector estaba su casa, sin embargo, en el barrio centro al parecer habría perdido el control del vehículo y se volcó.

El golpe fue tan grande que el joven de tan solo 18 años habría perdido la vida de contado luego del siniestro.

Uno de los vecinos que estaba cerca y escuchó el ruido que causó el volcamiento de la moto de inmediato se comunicó con los familiares del joven quienes pidieron ayuda al ECU 911 para que lo socorra y lo trasladen hasta el Hospital, pero en la casa de salud solo confirmaron que ya no tenía signos vitales.

El hecho se habría producido a eso de las 13:30 y su muerte se declaró ya a las 14:00. Hasta el lugar llegó personal del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) Tungurahua, quienes en presencia del Fiscal de turno realizaron el levantamiento del cadáver para posteriormente trasladarlo hasta el Centro Forense de Ambato para practicarle la autopsia de ley.

Del mismo modo fueron hasta el lugar donde ocurrió el accidente para determinar las causas del mismo y así poder saber qué fue lo que pasó para que Ronnie perdiera el control de su motocicleta.

Su historia

Entre los amigos, compañeros de colegio y vecinos que lo conocían comentaban que el joven recién se había graduado en el periodo lectivo 2018-2019 y que ahora estaba siguiendo un preuniversitario para poder alcanzar el puntaje necesario que le permita estudiar la universidad en una de las ramas de la medicina, pues ese era su sueño.

Entendían que su familia estuviese devastada pues él era el mayor de tres hijos y el ‘Guagua Pedrito’ como le decían en honor a su padre Pedro, era un referente de responsabilidad, atención y dedicación en su comunidad, pues jamás se lo conoció con vicios y siempre estaba ayudando a sus padres a trabajar en la agricultura.

Mientras esperaban a que se ejecuten los trámites de ley varias vecinas y familiares del joven con una chalina y en medio de plegarias y agradecimientos pedían colaboración para poder ayudar al hogar de Marlene y Pedro en este momento de dolor.

Ahora quienes conocieron a Ronnie esperan que su ejemplo sea perenne y pueda acompañar a sus padres y hermanitos que con el alma en mil pedazos deberán darle el último adiós. (NVP)

300

Personas

Aproximadamente, se apostaron en las afueras de emergencia del Hospital Básico de Pelileo para apoyar a la familia del occiso.