Hombre muere dentro de su camioneta en Quillán

SUCESO. Personal de la Policía Nacional junto a la Fiscalía realizaron una verificación del cuerpo dentro de la camioneta.
SUCESO. Personal de la Policía Nacional junto a la Fiscalía realizaron una verificación del cuerpo dentro de la camioneta.
SUCESO. Personal de la Policía Nacional junto a la Fiscalía realizaron una verificación del cuerpo dentro de la camioneta.
SUCESO. Personal de la Policía Nacional junto a la Fiscalía realizaron una verificación del cuerpo dentro de la camioneta.
SUCESO. Personal de la Policía Nacional junto a la Fiscalía realizaron una verificación del cuerpo dentro de la camioneta.
SUCESO. Personal de la Policía Nacional junto a la Fiscalía realizaron una verificación del cuerpo dentro de la camioneta.
SUCESO. Personal de la Policía Nacional junto a la Fiscalía realizaron una verificación del cuerpo dentro de la camioneta.
SUCESO. Personal de la Policía Nacional junto a la Fiscalía realizaron una verificación del cuerpo dentro de la camioneta.

Jacinto de Jesús Pérez de 64 años no alcanzó a despedirse de sus seres queridos, él fue hallado sin signos vitales en el interior de su camioneta de la Cooperativa Bolivariana, la noche del miércoles.

Esta noticia conmocionó a los habitantes del barrio Jesús del Gran Poder del sector de Quillán Loma en la parroquia Izamba, al norte de Ambato.

La persona que descubrió el cuerpo fue el dueño de casa, quien dijo minutos más tarde que Jacinto era su cliente cuando tenía su negocio de mecánica en el domicilio y aparentemente llegó a despedirse, pero no lo logró.

Investigación

En este caso fue indispensable la presencia de los integrantes de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) y Criminalística de Tungurahua, y para evaluar este hecho también llegó César López, fiscal de Flagrancia de Ambato.

Los peritos abrieron el carro y se percataron que los vidrios de la camioneta se encontraban empañados, por lo que se presume que la muerte de Jacinto se debería a una asfixia, para comprobar aquello, su cuerpo fue sacado del auto y ubicado en una bandeja metálica la que luego la pusieron en la unidad de Medicina Legal para su traslado al Centro de Investigaciones Forenses de Ambato.

El capitán Luis Alberto Rubio, jefe del Circuito Izamba, mencionó que a través del ECU 911 recibieron una alerta para verificar una persona fallecida.

“A nuestro arribo se constató que el hombre estaba en el área de conducción de una camioneta cooperada, por lo que fue indispensable la comparecencia de los integrantes de las unidades especializadas para su levantamiento”, afirmó Rubio.

El Jefe del Circuito también destacó que el afectado no tiene ningún signo de violencia de maltrato o tortura, pero se cree que fue una asfixia porque se quedó en el interior del auto y sin aire, “al momento que se abrió la cabina del carro se percibió un olor a licor, igualmente no presenta síntomas de bronco aspiración porque no se vieron fluidos ni en la nariz, tampoco en la boca, él fue visto a las 14:00 en el lugar”, afirmó.

Rubio finalmente señaló que la camioneta del occiso será llevada a los patios de la Policía Judicial de Tungurahua y luego entregada a los familiares.

Dolor

Hasta el levantamiento del cuerpo ningún familiar del occiso se acercó al lugar de los hechos. La Policía se comunicó con compañeros de la Cooperativa Bolivariana, los que luego les dieron esta penosa noticia a los allegados.

Víctor Manuel Torres, presidente de la Cooperativa, comentó que le llamaron en la noche del miércoles a contarle sobre el deceso de uno de los compañeros.

“A él le gustaba tomar y tenía la costumbre de estacionarse en algún lugar para libar y dormir, pero esta vez le jugó una mala pesada y no se volvió a despertar”, expresó Torres.

El Presidente, además, contó que la camioneta de Jacinto habría sido comprada hace dos meses, tras cambiarse su carro que ya llevaba más de 15 años en servicio.

“Le decíamos como apodo ‘El Jefecito’ ya que es uno de varios compañeros que pasan los 60 años. Así también lo traban quienes lo conocían en la parada de camionetas ubicada sobre las calles García Moreno y Eloy Alfaro, por la plaza Primero de Mayo”, siguió su relato Víctor, quien también comentó que Jacinto deja en la orfandad a dos hijos, una mujer y un hombre. (EV)

Jacinto de Jesús Pérez de 64 años no alcanzó a despedirse de sus seres queridos, él fue hallado sin signos vitales en el interior de su camioneta de la Cooperativa Bolivariana, la noche del miércoles.

Esta noticia conmocionó a los habitantes del barrio Jesús del Gran Poder del sector de Quillán Loma en la parroquia Izamba, al norte de Ambato.

La persona que descubrió el cuerpo fue el dueño de casa, quien dijo minutos más tarde que Jacinto era su cliente cuando tenía su negocio de mecánica en el domicilio y aparentemente llegó a despedirse, pero no lo logró.

Investigación

En este caso fue indispensable la presencia de los integrantes de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) y Criminalística de Tungurahua, y para evaluar este hecho también llegó César López, fiscal de Flagrancia de Ambato.

Los peritos abrieron el carro y se percataron que los vidrios de la camioneta se encontraban empañados, por lo que se presume que la muerte de Jacinto se debería a una asfixia, para comprobar aquello, su cuerpo fue sacado del auto y ubicado en una bandeja metálica la que luego la pusieron en la unidad de Medicina Legal para su traslado al Centro de Investigaciones Forenses de Ambato.

El capitán Luis Alberto Rubio, jefe del Circuito Izamba, mencionó que a través del ECU 911 recibieron una alerta para verificar una persona fallecida.

“A nuestro arribo se constató que el hombre estaba en el área de conducción de una camioneta cooperada, por lo que fue indispensable la comparecencia de los integrantes de las unidades especializadas para su levantamiento”, afirmó Rubio.

El Jefe del Circuito también destacó que el afectado no tiene ningún signo de violencia de maltrato o tortura, pero se cree que fue una asfixia porque se quedó en el interior del auto y sin aire, “al momento que se abrió la cabina del carro se percibió un olor a licor, igualmente no presenta síntomas de bronco aspiración porque no se vieron fluidos ni en la nariz, tampoco en la boca, él fue visto a las 14:00 en el lugar”, afirmó.

Rubio finalmente señaló que la camioneta del occiso será llevada a los patios de la Policía Judicial de Tungurahua y luego entregada a los familiares.

Dolor

Hasta el levantamiento del cuerpo ningún familiar del occiso se acercó al lugar de los hechos. La Policía se comunicó con compañeros de la Cooperativa Bolivariana, los que luego les dieron esta penosa noticia a los allegados.

Víctor Manuel Torres, presidente de la Cooperativa, comentó que le llamaron en la noche del miércoles a contarle sobre el deceso de uno de los compañeros.

“A él le gustaba tomar y tenía la costumbre de estacionarse en algún lugar para libar y dormir, pero esta vez le jugó una mala pesada y no se volvió a despertar”, expresó Torres.

El Presidente, además, contó que la camioneta de Jacinto habría sido comprada hace dos meses, tras cambiarse su carro que ya llevaba más de 15 años en servicio.

“Le decíamos como apodo ‘El Jefecito’ ya que es uno de varios compañeros que pasan los 60 años. Así también lo traban quienes lo conocían en la parada de camionetas ubicada sobre las calles García Moreno y Eloy Alfaro, por la plaza Primero de Mayo”, siguió su relato Víctor, quien también comentó que Jacinto deja en la orfandad a dos hijos, una mujer y un hombre. (EV)

Jacinto de Jesús Pérez de 64 años no alcanzó a despedirse de sus seres queridos, él fue hallado sin signos vitales en el interior de su camioneta de la Cooperativa Bolivariana, la noche del miércoles.

Esta noticia conmocionó a los habitantes del barrio Jesús del Gran Poder del sector de Quillán Loma en la parroquia Izamba, al norte de Ambato.

La persona que descubrió el cuerpo fue el dueño de casa, quien dijo minutos más tarde que Jacinto era su cliente cuando tenía su negocio de mecánica en el domicilio y aparentemente llegó a despedirse, pero no lo logró.

Investigación

En este caso fue indispensable la presencia de los integrantes de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) y Criminalística de Tungurahua, y para evaluar este hecho también llegó César López, fiscal de Flagrancia de Ambato.

Los peritos abrieron el carro y se percataron que los vidrios de la camioneta se encontraban empañados, por lo que se presume que la muerte de Jacinto se debería a una asfixia, para comprobar aquello, su cuerpo fue sacado del auto y ubicado en una bandeja metálica la que luego la pusieron en la unidad de Medicina Legal para su traslado al Centro de Investigaciones Forenses de Ambato.

El capitán Luis Alberto Rubio, jefe del Circuito Izamba, mencionó que a través del ECU 911 recibieron una alerta para verificar una persona fallecida.

“A nuestro arribo se constató que el hombre estaba en el área de conducción de una camioneta cooperada, por lo que fue indispensable la comparecencia de los integrantes de las unidades especializadas para su levantamiento”, afirmó Rubio.

El Jefe del Circuito también destacó que el afectado no tiene ningún signo de violencia de maltrato o tortura, pero se cree que fue una asfixia porque se quedó en el interior del auto y sin aire, “al momento que se abrió la cabina del carro se percibió un olor a licor, igualmente no presenta síntomas de bronco aspiración porque no se vieron fluidos ni en la nariz, tampoco en la boca, él fue visto a las 14:00 en el lugar”, afirmó.

Rubio finalmente señaló que la camioneta del occiso será llevada a los patios de la Policía Judicial de Tungurahua y luego entregada a los familiares.

Dolor

Hasta el levantamiento del cuerpo ningún familiar del occiso se acercó al lugar de los hechos. La Policía se comunicó con compañeros de la Cooperativa Bolivariana, los que luego les dieron esta penosa noticia a los allegados.

Víctor Manuel Torres, presidente de la Cooperativa, comentó que le llamaron en la noche del miércoles a contarle sobre el deceso de uno de los compañeros.

“A él le gustaba tomar y tenía la costumbre de estacionarse en algún lugar para libar y dormir, pero esta vez le jugó una mala pesada y no se volvió a despertar”, expresó Torres.

El Presidente, además, contó que la camioneta de Jacinto habría sido comprada hace dos meses, tras cambiarse su carro que ya llevaba más de 15 años en servicio.

“Le decíamos como apodo ‘El Jefecito’ ya que es uno de varios compañeros que pasan los 60 años. Así también lo traban quienes lo conocían en la parada de camionetas ubicada sobre las calles García Moreno y Eloy Alfaro, por la plaza Primero de Mayo”, siguió su relato Víctor, quien también comentó que Jacinto deja en la orfandad a dos hijos, una mujer y un hombre. (EV)

Jacinto de Jesús Pérez de 64 años no alcanzó a despedirse de sus seres queridos, él fue hallado sin signos vitales en el interior de su camioneta de la Cooperativa Bolivariana, la noche del miércoles.

Esta noticia conmocionó a los habitantes del barrio Jesús del Gran Poder del sector de Quillán Loma en la parroquia Izamba, al norte de Ambato.

La persona que descubrió el cuerpo fue el dueño de casa, quien dijo minutos más tarde que Jacinto era su cliente cuando tenía su negocio de mecánica en el domicilio y aparentemente llegó a despedirse, pero no lo logró.

Investigación

En este caso fue indispensable la presencia de los integrantes de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) y Criminalística de Tungurahua, y para evaluar este hecho también llegó César López, fiscal de Flagrancia de Ambato.

Los peritos abrieron el carro y se percataron que los vidrios de la camioneta se encontraban empañados, por lo que se presume que la muerte de Jacinto se debería a una asfixia, para comprobar aquello, su cuerpo fue sacado del auto y ubicado en una bandeja metálica la que luego la pusieron en la unidad de Medicina Legal para su traslado al Centro de Investigaciones Forenses de Ambato.

El capitán Luis Alberto Rubio, jefe del Circuito Izamba, mencionó que a través del ECU 911 recibieron una alerta para verificar una persona fallecida.

“A nuestro arribo se constató que el hombre estaba en el área de conducción de una camioneta cooperada, por lo que fue indispensable la comparecencia de los integrantes de las unidades especializadas para su levantamiento”, afirmó Rubio.

El Jefe del Circuito también destacó que el afectado no tiene ningún signo de violencia de maltrato o tortura, pero se cree que fue una asfixia porque se quedó en el interior del auto y sin aire, “al momento que se abrió la cabina del carro se percibió un olor a licor, igualmente no presenta síntomas de bronco aspiración porque no se vieron fluidos ni en la nariz, tampoco en la boca, él fue visto a las 14:00 en el lugar”, afirmó.

Rubio finalmente señaló que la camioneta del occiso será llevada a los patios de la Policía Judicial de Tungurahua y luego entregada a los familiares.

Dolor

Hasta el levantamiento del cuerpo ningún familiar del occiso se acercó al lugar de los hechos. La Policía se comunicó con compañeros de la Cooperativa Bolivariana, los que luego les dieron esta penosa noticia a los allegados.

Víctor Manuel Torres, presidente de la Cooperativa, comentó que le llamaron en la noche del miércoles a contarle sobre el deceso de uno de los compañeros.

“A él le gustaba tomar y tenía la costumbre de estacionarse en algún lugar para libar y dormir, pero esta vez le jugó una mala pesada y no se volvió a despertar”, expresó Torres.

El Presidente, además, contó que la camioneta de Jacinto habría sido comprada hace dos meses, tras cambiarse su carro que ya llevaba más de 15 años en servicio.

“Le decíamos como apodo ‘El Jefecito’ ya que es uno de varios compañeros que pasan los 60 años. Así también lo traban quienes lo conocían en la parada de camionetas ubicada sobre las calles García Moreno y Eloy Alfaro, por la plaza Primero de Mayo”, siguió su relato Víctor, quien también comentó que Jacinto deja en la orfandad a dos hijos, una mujer y un hombre. (EV)