Sentenciado por violar a una persona con discapacidad

PLANTÓN. Varios carteles fueron ubicados a las afueras de la Unidad Penal de Ambato.
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PLANTÓN. Varios carteles fueron ubicados a las afueras de la Unidad Penal de Ambato.
PLANTÓN. Varios carteles fueron ubicados a las afueras de la Unidad Penal de Ambato.
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PLANTÓN. Varios carteles fueron ubicados a las afueras de la Unidad Penal de Ambato.

El Tribunal de Garantías Penales de Tungurahua sentenció a Edwin R. a 29 años y cuatro meses de cárcel por el delito de violación, además, le impusieron el pago de una de una reparación integral de 10.000 dólares.

Aquello tras comprobar que el sujeto fue el responsable de este delito sexual contra una adolescente con el 43% de discapacidad intelectual.

Hechos

En mayo de 2019 la adolescente desapareció por unas horas y cuando regresó a casa, sus padres revisaron su celular en el que encontraron mensajes de texto, audios y fotografías de connotación sexual, enviados por el hoy sentenciado.

De inmediato los padres acudieron a la Fiscalía de Tungurahua, donde una de las autoridades empezó a indagar de este caso hasta que se comprobó que existió un delito sexual.

Se cree que la menor fue víctima de violación en el transcurso de los meses de enero a mayo de 2019, el sujeto se habría cuidado de no ser descubierto, pero el ‘diablo se le durmió’.

La adolescente de 16 años habría recibido mensajes de su vecino, quien a su vez es padre de uno de sus compañeros de colegio, el que la invitó salir en varias ocasiones.

Según la investigación, el ciudadano de 44 años agredía sexualmente a la víctima en su auto, en lugares alejados.

Audiencia

Tanto en la audiencia preparatoria de juicio como en la de sentencia, un fiscal de Tungurahua presentó pruebas ante el Tribunal como el parte policial en donde se relató la detención del involucrado.

Y como pruebas fundamentales se indicó el informe pericial de extracción de mensajes de texto, explotación de fotografías y audio de los celulares tanto del procesado y de la víctima.

Además, se comprobó que tanto en el examen ginecológico como en el médico legal se determinó que existía una violación a la afectada.

También en el informe psicológico se determinó que hubo daños a la menor con discapacidad, quien sentía impotencia en no poder defenderse de su agresor.

Estas y otras pruebas fueron indispensables y determinaron la responsabilidad penal de Edwin, quien pasará interno en la cárcel de Ambato. (EV)

EL DATO

El agresor fue sancionado de acuerdo al artículo 171 del Código Orgánico Integral Penal (COIP).

El Tribunal de Garantías Penales de Tungurahua sentenció a Edwin R. a 29 años y cuatro meses de cárcel por el delito de violación, además, le impusieron el pago de una de una reparación integral de 10.000 dólares.

Aquello tras comprobar que el sujeto fue el responsable de este delito sexual contra una adolescente con el 43% de discapacidad intelectual.

Hechos

En mayo de 2019 la adolescente desapareció por unas horas y cuando regresó a casa, sus padres revisaron su celular en el que encontraron mensajes de texto, audios y fotografías de connotación sexual, enviados por el hoy sentenciado.

De inmediato los padres acudieron a la Fiscalía de Tungurahua, donde una de las autoridades empezó a indagar de este caso hasta que se comprobó que existió un delito sexual.

Se cree que la menor fue víctima de violación en el transcurso de los meses de enero a mayo de 2019, el sujeto se habría cuidado de no ser descubierto, pero el ‘diablo se le durmió’.

La adolescente de 16 años habría recibido mensajes de su vecino, quien a su vez es padre de uno de sus compañeros de colegio, el que la invitó salir en varias ocasiones.

Según la investigación, el ciudadano de 44 años agredía sexualmente a la víctima en su auto, en lugares alejados.

Audiencia

Tanto en la audiencia preparatoria de juicio como en la de sentencia, un fiscal de Tungurahua presentó pruebas ante el Tribunal como el parte policial en donde se relató la detención del involucrado.

Y como pruebas fundamentales se indicó el informe pericial de extracción de mensajes de texto, explotación de fotografías y audio de los celulares tanto del procesado y de la víctima.

Además, se comprobó que tanto en el examen ginecológico como en el médico legal se determinó que existía una violación a la afectada.

También en el informe psicológico se determinó que hubo daños a la menor con discapacidad, quien sentía impotencia en no poder defenderse de su agresor.

Estas y otras pruebas fueron indispensables y determinaron la responsabilidad penal de Edwin, quien pasará interno en la cárcel de Ambato. (EV)

EL DATO

El agresor fue sancionado de acuerdo al artículo 171 del Código Orgánico Integral Penal (COIP).

El Tribunal de Garantías Penales de Tungurahua sentenció a Edwin R. a 29 años y cuatro meses de cárcel por el delito de violación, además, le impusieron el pago de una de una reparación integral de 10.000 dólares.

Aquello tras comprobar que el sujeto fue el responsable de este delito sexual contra una adolescente con el 43% de discapacidad intelectual.

Hechos

En mayo de 2019 la adolescente desapareció por unas horas y cuando regresó a casa, sus padres revisaron su celular en el que encontraron mensajes de texto, audios y fotografías de connotación sexual, enviados por el hoy sentenciado.

De inmediato los padres acudieron a la Fiscalía de Tungurahua, donde una de las autoridades empezó a indagar de este caso hasta que se comprobó que existió un delito sexual.

Se cree que la menor fue víctima de violación en el transcurso de los meses de enero a mayo de 2019, el sujeto se habría cuidado de no ser descubierto, pero el ‘diablo se le durmió’.

La adolescente de 16 años habría recibido mensajes de su vecino, quien a su vez es padre de uno de sus compañeros de colegio, el que la invitó salir en varias ocasiones.

Según la investigación, el ciudadano de 44 años agredía sexualmente a la víctima en su auto, en lugares alejados.

Audiencia

Tanto en la audiencia preparatoria de juicio como en la de sentencia, un fiscal de Tungurahua presentó pruebas ante el Tribunal como el parte policial en donde se relató la detención del involucrado.

Y como pruebas fundamentales se indicó el informe pericial de extracción de mensajes de texto, explotación de fotografías y audio de los celulares tanto del procesado y de la víctima.

Además, se comprobó que tanto en el examen ginecológico como en el médico legal se determinó que existía una violación a la afectada.

También en el informe psicológico se determinó que hubo daños a la menor con discapacidad, quien sentía impotencia en no poder defenderse de su agresor.

Estas y otras pruebas fueron indispensables y determinaron la responsabilidad penal de Edwin, quien pasará interno en la cárcel de Ambato. (EV)

EL DATO

El agresor fue sancionado de acuerdo al artículo 171 del Código Orgánico Integral Penal (COIP).

El Tribunal de Garantías Penales de Tungurahua sentenció a Edwin R. a 29 años y cuatro meses de cárcel por el delito de violación, además, le impusieron el pago de una de una reparación integral de 10.000 dólares.

Aquello tras comprobar que el sujeto fue el responsable de este delito sexual contra una adolescente con el 43% de discapacidad intelectual.

Hechos

En mayo de 2019 la adolescente desapareció por unas horas y cuando regresó a casa, sus padres revisaron su celular en el que encontraron mensajes de texto, audios y fotografías de connotación sexual, enviados por el hoy sentenciado.

De inmediato los padres acudieron a la Fiscalía de Tungurahua, donde una de las autoridades empezó a indagar de este caso hasta que se comprobó que existió un delito sexual.

Se cree que la menor fue víctima de violación en el transcurso de los meses de enero a mayo de 2019, el sujeto se habría cuidado de no ser descubierto, pero el ‘diablo se le durmió’.

La adolescente de 16 años habría recibido mensajes de su vecino, quien a su vez es padre de uno de sus compañeros de colegio, el que la invitó salir en varias ocasiones.

Según la investigación, el ciudadano de 44 años agredía sexualmente a la víctima en su auto, en lugares alejados.

Audiencia

Tanto en la audiencia preparatoria de juicio como en la de sentencia, un fiscal de Tungurahua presentó pruebas ante el Tribunal como el parte policial en donde se relató la detención del involucrado.

Y como pruebas fundamentales se indicó el informe pericial de extracción de mensajes de texto, explotación de fotografías y audio de los celulares tanto del procesado y de la víctima.

Además, se comprobó que tanto en el examen ginecológico como en el médico legal se determinó que existía una violación a la afectada.

También en el informe psicológico se determinó que hubo daños a la menor con discapacidad, quien sentía impotencia en no poder defenderse de su agresor.

Estas y otras pruebas fueron indispensables y determinaron la responsabilidad penal de Edwin, quien pasará interno en la cárcel de Ambato. (EV)

EL DATO

El agresor fue sancionado de acuerdo al artículo 171 del Código Orgánico Integral Penal (COIP).