Padres ven en escuelas rurales una alternativa

Realidad. Varias escuelas rurales permanecen en el abandono.
Realidad. Varias escuelas rurales permanecen en el abandono.

Los juegos infantiles cubiertos con la maleza, salones vacíos, algunos sin bancas, ni pizarras, en uno de esos una sala amplia que a veces se ocupa para reuniones comunitarias por padres de familia, así, en abandono, es como permanece la escuela Adolfo Jurado en la comunidad de San Francisco de Tisaleo.

Este centro rural educaba a cerca de 100 niños de los diferentes barrios aledaños a la comunidad, donde incluso los mismos padres podían llevarlos todos los días hasta hace algunos años, cuando se decidió cerrarlos por la supuesta construcción de la escuela del Milenio.

Expectativa

Hoy bajo la adversidad de una pandemia que asecha y ante el ofrecimiento de una habilitación parcial y progresiva de las escuelas rurales los padres de familia aseguran que esta es una oportunidad para retomar la educación en las comunidades.

Para Miguel Tisalema, padre de familia, el enviar a sus hijos de 9 y 6 años de edad a una escuela que alberga cientos de estudiantes sería impensable en vista de que la pandemia desatada por el Covid-19 está latente y lejos de ser controlada.

“Solo en el grado de mi hijo son 38 niños, eso sería un foco de infección”, dijo al tiempo de reconocer que si se habilitan las escuelas que fueron cerradas anteriormente se descongestionaría las unidades educativas y podría controlarse mejor el distanciamiento para prevenir el contagio.

Para Marcelo Miranda, padre de familia, la educación en casa no es que funciona mucho, por ello está de acuerdo que se realice una apertura progresiva de las escuelas rurales. “Solo es cuestión de lógica, tener grados con un máximo de 15 a 20 estudiantes sí se puede trabajar”, dijo.

Según el padre de familia los niños requieren volver a las cercanías de sus comunidades y no tener que viajar largas jornadas para estudiar. “Incluso ahora van en busca de internet a otras comunidades, todo porque las autoridades no quieren adecuar las escuelas que tenemos botadas en nuestros sectores”, mencionó.

Ofrecimientos

En el 2019 el Gobierno anunció que se reabrirían las escuelas rurales cerradas en el anterior régimen, aunque se dijo que solo mil planteles serían beneficiados priorizando sitios pobres de la Sierra central, pero esto no se cumplió en su totalidad.

Monserrat Creamer, ministra de Educación, reconoció que el sector rural es el más afectado en cuanto al proceso educativo y al acceso al mismo, esto a pesar de que se ha brindado apoyo a través de las guías impresas que se han entregado en estos espacios, así como también el acercamiento de la educación por medio de radio y televisión.

Sin embargo, ha sido complejo el trabajo, por lo que aseguró que se está planificando que las instituciones rurales sean las primeras que retornen de forma progresiva.

“Tenemos el escenario muy claro, serían las unidades educativas unidocentes o bidocentes hasta 35 estudiantes, no más”, aseguró.

La Ministra también indicó que esta reapertura no se desarrollará si no es primero con un acuerdo de compromiso de la comunidad, y a su vez con el Ministerio de Salud y autoridades locales. (FCT)