¿Cerca de un ‘ataque de nervios’?

El endeudamiento heredado por el régimen de Lenín Moreno y que hasta el momento se registra, ha vuelto a los entendidos criollos en la materia partidarios de negociar con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Lo sorprendente es que las organizaciones políticas y sociales, que antes tenían a la institución como símbolo del poder imperial, se manifiestan con evidente tibieza.

Representantes del Fondo están en Quito echando la lupa sobre el Plan Económico del Gobierno y al comportamiento de las instituciones que lo manejan, y en algunos sectores se respira con alivio. La crisis económica ha sido la mejor escuela, así como los préstamos con intereses leoninos a los que Ecuador debió aferrarse para mantener la dolarización, han sido la mejor escuela para todos.

Toca en este momento precisar cifras y enderezar las proyecciones. La manipulación corrupta de la información macroeconómica nos ha llevado a la encrucijada que tenemos delante: por un lado, la resaca populista, y por otro, un pragmatismo gradual que para no pocos es desesperante e inquietante. El diálogo con el FMI puede darnos una idea de dónde estamos y qué ritmo seguir en lo adelante.

Nuestros compatriotas entienden hoy que las “garras imperiales” andan repartidas por el planeta. En cuestión de plata, el altruismo siempre, al principio o al final, pierde la partida. Unas simples cuentas de suma y resta sirven para entender que, durante años, el crecimiento de nuestra economía no se compadece con el de nuestra población. Es utópico, por no decir delirante, aspirar a tener una “sociedad del bienestar” de la noche a la mañana.


Cada experiencia lleva en sí misma su lección”. Frank Herbert Escritor estadounidense (1920-1986)No rechaces tus sueños. ¿Sin la ilusión el mundo qué sería?”. Ramón De Campoamor Poeta español (1817-1901)